domingo, 7 de septiembre de 2008

Galletas para desayunar

Ademas de mi conocida relación con la CDLM también me dedico a surcar otras sendas menos conocidas pero no por ello menos animadas. Hay que decir que CDLM tiene ese halo de peligro y temeridad con toda razón, pero no dejan de ser poco más de 40m.

Existen sin embargo otras sendas mas largas, mas reviradas y con un suelo mucho mas variopinto (raices, barro, matojos, raices apuntando al cielo como agujas, piedras, piedras mas grandes, surcos del agua y blablabla...) He encontrado algunas que bajan desde el Cerro de Garabitas y desde el Cerro de Morán y por supuesto que me he tirado todo lo rápido que la bici y yo hemos podido. Frenazos, derrapes, saltos, botes, traqueteos y algún que otro pie a tierra es lo que me han proporcionado, ademas de un poco de ejercio cargando con la bici hasta arriba, sujetando el manillar con decisión, apretando el culo, las piernas los pies y los dientes para mantenerme en la trayectoria y siempre de menos a mas (no es plan de locuras, hay que aprender).

Después de estos momentos de tensión y esfuerzo, para ir de un sitio a otro hay sendas mas o menos transitadas pero muy suaves donde no hay peligro la mayoría de veces... y es hay donde se desayunan las galletas.

Por una senda que iba pegada a un tubo, después de apretar los dientes a saco por un par de lugares, buscaba otra senda de esas tensas. El tubo tenia agujeros, y uno apreció muy cerca; la bici y yo, esta vez, no discrepamos, pero nos desayunamos una galleta guapa. Como ya iba con los frenos a tope la rueda de delantera se clavó, la bici dio una voltereta y yo aterricé con las manos primero y el hombro derecho después. Nada de sangre, solo golpes, pero como palos con gusto no duelen la moraleja es: "Invierte en bici y protecciones"

Por eso planeo una mejora sustancial de montura (por supesto tambien del "decartón" que ser becario es lo que tiene) y unas protecciones para las rodillas y codos. El casco integral caerá con el Gordo barrigudo o con los Tres Camellos.

PD: Por muy malo que pueda parecer, después del golpe aun me metí por tres sendas más, así que no os creáis que que esto es tan peligroso, que parece que quedo como un loco temerario sin aprecio por su cuerpo. Siempre hay que conservar tornillos para perder

1 comentario:

Hachoweb dijo...

Si cundo digo que estas como una cabra.... es por algo.

Protección, siempre protección.

Un saludo de Hachoweb.